Podemos saber muchas cosas sobre los quehaceres que ayudan a controlar el dolor de espalda y el estrés, pero si no los ponemos en práctica ese conocimiento tiene poco valor. Si no haces nada probablemente te duela la espalda, probablemente tengas estrés, probablemente te duela la espalda y tengas estrés. Aquí el dos apuntes sobre el sitio donde trabajas:
*Puesto de trabajo cerrado. Si tu lugar físico de trabajo es un cubículo cerrado, hermético, estanco,… tienes una probabilidad más grande que tu actividad física, tu niveles de estrés y tu calidad de sueño sea… no sea. Movimiento nulo o insuficiente, mayor sensación de estrés y mayor cansancio. En general, tu fatiga física y mental será mucho mayor
*Puesto de trabajo abierto. Aquí encontramos un punto opuesto al contrario. Si tu puesto de trabajo es abierto te permitirá una mayor capacidad de movimiento que influirá en un menor estrés y una mejor calidad de sueño.
¿Por qué te cuento esto?.
Quiero hacerte ver que existen pequeños detalles que puedes implementar en tu rutina diaria sin apenas muchas modificaciones y que pueden generan un impacto muy interesante en tu dolor de espalda y en tu estrés.
Si te estás preguntando si sé más cosillas de estas, te respondo con un sí. De eso y más hablo en una formación dedicada en exclusiva para aprender a manejar el dolor de espalda y el estrés en el trabajo. Te dejo más información por si quieres curiosear en la solución aconsejada.