El viernes pasado te hablaba de una manera de mejorar el dolor de espalda y el estrés basada en el movimiento. En todas esas cosas que haces a lo largo del día, tu actividad física diaria. En lo persona, en lo laboral.
Quiero seguir rascando el concepto para hacerte ver que implementarlo puede ser realmente sencillo y útil. ¿Para qué?. Para un montón de cosas. Para mi (en nuestro caso) reducir tu dolor de espalda y minimizar tu estrés. All right??
Aquí una pregunta clave: ¿Eres consciente de lo que te mueves cada día?.
– Si. No. Por supuesto, no me muevo nada. No paro en todo el día. Podemos encontrar muchas respuestas.
En serio. ¿La sabes?. Aunque te parezca ridículo. Aunque parezca una tontería, sabemos que ser consciente de lo mucho o poco que nos movemos tiene un impacto muy significativo en nuestra salud. Es más, tiene un impacto para la mejora de los estilos de vida. Si sabes que te mueves poco y entiendes la relación entre movimiento y las dos patologías que hablamos (dolor espalda y estrés), puedes sacarle mucho rendimiento para comenzar a cambiar tu estilo de vida sin modificar mucho tu rutina diaria.
Todo esto lo sabemos por una curiosa investigación donde los autores (Alia Crum y Ellen Langer; Universidad de Harvard, 2007) analizaron el imapacto que tiene en los trabajadores el saber lo mucho que se mueven durante la jornada laboral y como ese genera un beneficio en su salud. Su hipótesis se centro en : ¿llegarían a creer que estaban en forma y eso produciría efectos significativos en su peso y su tensión?. Ya intuyes la respuesta, ¿verdad?.
Lo que provocó el cambio fue el poder placebo. Simplemente pensar en lo activo que somos (o no) a lo largo del día puede hacer que nuestro dolor de espalda y estrés sea menor. ¿Ves la relación?.
– Aquí tienes un sencillo paso para empezar a trabajar sobre tu dolor de espalda y estrés.
¿Cómo?. Te lo explico con un desafío para ti.
Te lanzo el reto durante esta semana de centrarte en ese tu primer paso: analizar al final de cada día lo mucho o lo poco que te has movido. Puedes calcular el número de pasos realizador, el tiempo de movimiento activo, la distancia recorrida, las calorías consumidas,… o simplemente analizar tu percepción para intuir si te mueves mucho, algo, poco o nada.
A mi me gusta centrarme en las dos. Pirmero en datos subjetivos: tus sensaciones. Después de datos objetivos: algo que podamos medir. ¿Por qué?. Para poder comparar, analizar tu situación real y proponer las soluciones adecuadas para ti.
Este es un ejemplo de las cosillas que trabajo en el Programa Es Premium para reducir el dolor de espalda y el estrés en el entorno laboral: https://gottraining.es/programa-premium/
Pd. El plazo de reserva de fechas para ponerlo en marcha en tu empresa está activo hasta el 22 de mayo, así que si te interesa no tardes en cerrar una fecha. ¿Dónde?. En el enlace de arriba ; )
Y si necesitas más información ues hablamos ; )